Las aguas subterráneas son fundamentales para el consumo humano, así como para la agricultura, de ahí la importancia que adquieren los pozos de bombeo. Con ellos se extrae el agua que haya quedado estancada.
¿Qué son los pozos de bombeo y para qué sirven?
Los pozos de bombeo son equipos idóneos para recoger, almacenar y bombear aguas pluviales o fecales; se eleva el agua a cotas superiores para superar los posibles desniveles existentes. Sin la bomba agua pozo, esta no podría ser evacuada.
¿Qué tipos de pozos de bombeo existen?
Hay dos tipos de pozos de bombeo:
· Para aguas limpias. Para bombear este tipo de aguas, disponemos de dos modelos: con una bomba o con dos bombas incorporadas.
· Para aguas sucias. Este equipo está destinado al bombeo de aguas fecales: residuales, las que provienen de los hogares o aguas nocivas. Los modelos son similares a las anteriores, con una o con dos bombas.
También disponemos de arquetas de elevación, que proporcionan la instalación para el proceso de depuración del agua sin necesidad de realizar excavaciones en el suelo.
Ventajas de los pozos de bombeo
Entre las ventajas que podemos encontrar en los pozos de bombeo están:
1. Ahorro significativo. Con estas herramientas no será necesaria la realización de obras.
2. Alojar bombas de agua. En un pozo de bombeo podrás almacenar las bombas de agua, siempre que estas sean sumergibles.
3. Depósito. Se incluirán todos los elementos necesarios en un solo depósito.
4. Nivel freático. Al extraer el agua que se haya quedado estancada, se mejora la capa superior del acuífero.
5. Amplia variedad. Se podrá elegir el pozo de bombeo que más se adapte a las necesidades, en cuanto a medidas y precios.
En definitiva, así son estos separadores de hidrocarburos, con sus usos y ventajas.
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